Por Ray Suárez de PBS (Traducción y reseña por AMEII) – De acuerdo a los registros médicos divulgados, el ex presidente John F. Kennedy sufrió de mucho dolor antes y durante su presidencia lo que lo hacía tomar medicamentos de lo que se sabía anteriormente.
Un médico de Washington, Dr. Jeffrey Kelman examinó los registros con el historiador Robert Dallek, cuyos extractos de una biografía aparece en el Atlantic Monthly.
John F. Kennedy fue famoso por ser el hombre más joven elegido para el cargo de Presidente de los Estados Unidos de América. Pero su apariencia en público no daba a relucir el sufrimiento que tenía diariamente.
“John Kennedy estuvo enfermo desde los 13 años. En 1930, cuando tenía 13 años, desarrolló dolor abdominal. En 1934 fue enviado a la Clínica Mayo, donde le diagnosticaron colitis o se le llamaba colitis. En 1940 le empezó a doler la espalda, y en 1944 tuvo su primera operación en la espalda, y para 1947 fue oficialmente diagnosticado con la enfermedad de Addison.” Dijo el Dr. Kelman quien examinó los registros médicos de esa época para conocer más de la salud de John F. Kennedy.
“Estuvo enfermo básicamente por el resto de su vida” “Quiero decir, la imagen que se obtiene de la salud y el vigor progresiva no era cierto. Estaba jugando con dolor la mayor parte de la presidencia.”
“En el momento en que él era presidente, él estaba en diez, 12 medicamentos al día. Él estaba en antiespasmódicos para su intestino, paregórico, lamodal transatine [ph], con relajantes musculares, fenobarbital, Librium, Meprobomate, fue en medicamentos para el dolor, la codeína, demerol, metadona, cortisona por vía oral, también con cortisona inyectada, testosterona, Nembutal para dormir. Y encima de que se iba a inyectar a veces seis veces al día, seis lugares en la espalda, por el médico de la Casa Blanca, con novocaína, procaína, sólo para que pudiera enfrentar el día.” Mencionó el Dr. Kelman
A finales de los 40 se le diagnosticó la enfermedad de Addison. Que es una insuficiencia suprarrenal. La glándula suprarrenal produce corticoides y otras hormonas que se usan para el metabolismo de la sal, la respuesta al estrés, la respuesta a la inflamación. En ’47 se le diagnosticó oficialmente en Inglaterra, como las glándulas suprarrenales insuficiente, y partir de ese momento, al menos en ese momento, estaba siendo tratado con corticoides diarias de una forma u otra. Existe alguna evidencia de que en realidad estaba siendo tratado anteriormente, con una forma de [inaudible] implantado bajo la piel. Pero menos, desde el 47 tenía que recibir esteroides diariamente para sobrevivir.
“Kennedy necesitaba múltiples ciclos de antibióticos, tuvo infecciones urinarias, infecciones de la piel, tenía las infecciones respiratorias.” Mencionó el Dr. al preguntársele de los efectos secundarios al usar los esteroides.
Ray Suárez quien hacia la entrevista al médico le preguntó si su apariencia se alteró por los medicamentos para lo que el médico dijo: “Ganó y perdió peso, tanto de la colitis y de los esteroides, y del apetito, es por eso que él estaba en la testosterona, con el fin de estimular el crecimiento muscular y estimular su apetito. Así que su actuación – su aspecto más bien hizo el cambio de vez en cuando.”
“Los esteroides se hicieron disponibles en 1937. Y esto es bastante nuevo. Los esteroides del edificio del músculo son las testosteronas, y él no parecía estar recibiendo dosis suficientemente altas como para causar cambios psicológicos. El mantenimiento, los corticoides que estaba recibiendo de la Enfermedad de Addison, de nuevo, probablemente no eran en dosis suficientemente altas para causar problemas psiquiátricos.” Respondió el médico al preguntarle por el uso de esteroides como la testosterona y por la cortisona como el tratamiento para su enfermedad. Que cabe aclarar que la testosterona y la corticoide son medicamentos diferentes.
De las radiografías el médico menciona que Kennedy “Tenía fracturas por compresión en la espalda baja, tenía osteoporosis. Tenía muchas cirugías. En 1954, se puso una placa porque el dolor era mucho y necesitaba que su columna se estabilizara. En los últimos años de los 50s había tenido períodos que no se podía poner sus propios zapatos porque no podía inclinarse hacia adelante.”
Ray Suárez le pregunta al médico “¿Ha cambiado la medicina de tal manera que estas condiciones no serían tratados de esta manera hoy en día?” y el médico le respondió “Está claro, pero estamos 40 años más tarde. Quiero decir que hay más énfasis en el uso de antinflamatorios no esteroideos, hay programas de ejercicios para fortalecer la espalda, menos en la inyección de puntos gatillo, aunque siguen siendo usados. Habría sido tratada de manera diferente ahora, pero eso es de 40 años de retrospectiva.”
Y para concluir la entrevista el médico dijo “Esa fue mi impresión. Es curioso, quiero decir, la lección que saqué de esto fue que este hombre tenía una discapacidad real, quiero decir, estaba viviendo con una discapacidad que, probablemente, podía conseguir la discapacidad federal o de la jubilación si él estuviera de eso hoy en día, y así fue conocida. Él estaba en medicamentos para el dolor lo suficiente como para terminar con él. Y él sobrevivió a través de él. Salió de eso, y él se realizó en el más alto nivel.”
Sin duda uno de sus epigramas más famosos presidenciales fue cuando Kennedy declaró en 1962 “La vida es injusta, algunas personas están enfermas otras están bien” donde la parte de al final muchos la omiten y dejan hasta “la vida es injusta”
Aunque no se puede afirmar que Kennedy padeció de CUCI, podemos comparar la travesía por la que se afrontaba diariamente entre el dolor, los tratamientos, el cargo que ejercía y la función que realizó hasta el día de su muerte, debe reconocerse que fue y es un hombre que no solo sorprenderá por la presidencia, si no por las dificultades físicas que trató de no reflejar en público y que hasta hoy se dan a conocer un poco más a fondo.
https://ameii.mx/la-salud-secreta-del-presidente-john-f-kennedy/
